Apple
El cambio de Apple tras la muerte de Steve Jobs
Hace años escribí una pequeña reflexión sobre el rumbo que tomó Apple tras la muerte de Steve Jobs, y me gustaría compartirla con vosotros. Era un hombre de fuerte carácter y convicciones. Tenía claro qué hacer y qué no para llevar los productos de Apple al más alto nivel. Generalmente sus opiniones daban buenos resultados excepto en casos como los del iPod.
En más de una ocasión aseguró que por encima de su cadáver dejaría sincronizar el dispositivo en un ordenador con Windows. Finalmente lo permitió, hecho que convertiría al iPod en un éxito. Como he comentado anteriormente, hombre de fuertes convicciones y fiel a sus ideas se negó a fabricar según qué productos, aunque eso no agradara a cierto público.
Con su muerte en el 2011, Apple no ha vuelto a ser la misma y parece que poco a poco va dejando atrás esas ideas que la hicieron única. Hoy en este artículo te muestro cuatro claros ejemplos que hacen que se vaya difuminando un poco más en el tiempo la huella de Steve Jobs.
Lápiz electrónico
Cuando Apple cuando presentó el iPad Pro, también se mostró un stylus denominado Apple Pencil. Este hecho soltó alguna que otra risa. Si echamos la vista atrás, en el año 2007 en San Francisco, en aquella convención MacWorld se presentó el iPhone. En esa presentación, Jobs no pudo reprimir su crítica hacia otros teléfonos inteligentes que utilizaban los ya mencionados lápices electrónicos. De ahí su mítica frase “¿Quién quiere un stylus?”.
De hecho, cuando Steve Jobs volvió a Apple en 1997, una de sus primeras medidas fue la de eliminar el Newton que dejó de comercializarse en 1998. El Newton consistía en una especie de tableta que utilizaba dicho lápiz. También es verdad que estaba hablando de un dispositivo pequeño, el iPhone contaba entonces con 3,5 pulgadas que nada tienen que ver con las del iPad 2018 o del Pro. Tanto uno como otro, son iPad enfocados a un público más profesional o que este estudiando; usuarios que suelen tomar notas o realizar diseños y que lo aprovecharán más que el resto de usuarios.
“DIOS NOS DIO 10 LÁPICES. NO INVENTEMOS OTRO” DIJO JOBS AL REFERIRSE AL PROYECTO
Teléfonos grandes
Otra de las ideas de Jobs era que los teléfonos debían poder manejarse con una mano. En el 2010, después de sacar al mercado el iPhone 4 surgieron errores derivados de la actualización de sus materiales de fabricación (se pasó del cuerpo de plástico, a una delantera y trasera de vidrio y marcos de acero inoxidable). Este marco servía también cómo antena, hecho que provocó quejas por parte de los usuarios, que notaban como se perdía intensidad en la señal al sostener el marco inferior izquierdo del terminal. Esto se denominó Antennagate.
Apple lanzó una actualización, regaló varias fundas y un estuche que cubría la antena del teléfono resolviendo el problema. Cuándo un periodista le sugirió que el problema se podría solucionar haciendo teléfonos más grandes que mejoraran la fiabilidad de la antena, el bueno de Steve no dudó en burlarse de la gama S de Samsung a los que se refería como Hummers. “Nadie comprará eso”, aseguraba. Después de su muerte podemos ver la evolución de los iPhone hasta la fecha, y el éxito de los nuevos terminales de mayor tamaño.
iPads pequeños
Uno de los frentes con los que se topó este carismático individuo fue el de la tendencia de la competencia en disminuir el tamaño de las tabletas. Basándose en las cuentas de la empresa, Steve Jobs afirmó que el tamaño mínimo recomendado para una tableta eran las 10 pulgadas. Éste ha sido uno de los cambios que Apple ha introducido después de la muerte de su cofundador, y que quizás no se pueda cuestionar tanto, ya que el iPad Mini ha sido uno de los productos más vendidos de la compañía.
Esto da para un intenso debate sobre cuál es la mejor Apple, la de Steve Jobs o la de Tim Cook. Desde luego los dos tienen personalidades y objetivos diferentes. Jobs tenía un carácter determinado que se plasmaba en cada movimiento y/o producto de la compañía, en cambio Cook es el responsable en cierto modo del éxito de Apple en la actualidad. Una empresa en la que el valor de sus acciones han crecido un 90% en lo últimos años. Si tan mal lo está haciendo el tío Tim, los resultados dicen lo contrario. Ha sabido escuchar al mercado sin morir en el intento.
Filantropía
Después de eliminar los lápices electrónicos en 1997, al volver a la compañía, Steve Jobs eliminó el programa de donaciones de Apple. Él decía que si quería recuperar la rentabilidad de la compañía debía hacerlo. Bien es cierto que no recuperó el programa cuando se mostraron los beneficios de la compañía, y se pudo ver que eran los más altos registrados por una empresa.
En contra, después de su muerte y nada más tomar el control Tim Cook en 2011, una de las primeras medidas del actual CEO fue recuperar el programa de donaciones.
Cómo he mencionado antes, estos son cuatro de los puntos que creo más significativos en la nueva Apple. En mi humilde opinión, los resultados hablan por si solos. Tampoco es una competición por ver quién es el más guapo, como muchos pretenden. Simplemente son estilos directivos distintos, Tim Cook es un buen CEO para la compañía y Steve Jobs también lo fue.
¿Qué se extraña de Jobs? Quizás el aura mágica o de grandeza que lo rodeaba, era un gran orador, manejaba las palabras y sabía lo que quería. Se debería recuperar el hermetismo a mi parecer (y al de alguno de mis compañeros) que antes tenían las keynotes. Porque ahora son más para confirmar rumores, que para presentar productos.
¿Tú qué opinas? ¿Añadirías algún cambio más? ¿One more thing?